Jenaro Villamil
México, DF. Miles de capitalinos participaron en la marcha de apoyo a la manifestación realizada en Cuernavaca, Morelos, por el asesinato de seis jóvenes, entre ellos el hijo del poeta Javier Sicilia. La Jornada / José Carlo González
Poetizados y politizados, multiclasistas e indignados, más de 10 mil personas marcharon de la explanada de Bellas Artes al Zócalo de la Ciudad de México para protestar por los efectos de la guerra contra el narcotráfico, al mismo tiempo que otros 8 mil ciudadanos, encabezados por el poeta y periodista Javier Sicilia, protestaron en Cuernavaca, el epicentro de esta protesta simultánea, a raíz de la ejecución de 7 jóvenes el pasado 28 de marzo en Temixco, Morelos.
“¡Fuera Calderón! ¡Fuera Calderón!”, gritaron durante su paso los ciudadanos convocados en las últimas 36 horas que se reunieron en un templete improvisado, frente a Palacio Nacional, en el Zócalo de la Ciudad de México. Reclamos similares se escucharon en Monterrey, Mérida, Guadalajara y decenas de ciudades más donde se escuchó el grito de protesta.
Tres jóvenes portaban unas camisetas que parecían resumir el contagio del tsunami generacional que ha llegado a este país: “Egipto, Túnez, Yemen y ahora México”. Otros portaban los carteles con el logo “¡No más Sangre!” y “Ni un muerto más”. Y los del Foro Alicia imprimieron cartulinas con la frase: “Paremos las Balas”.
El tono opositor a la guerra contra el narcotráfico fue el tono predominante de la marcha capitalina y de la mayoría que se realizó en ciudades como Nueva York, París, Barcelona, Buenos Aires o Vancouver.
Sin partido ni político que pudiera apropiarse de la movilización, mucho menos sin loas a Televisa y su Iniciativa México con todo su demagógico “Acuerdo de Cobertura Informativa contra la Violencia”, los ciudadanos movilizados no dejaron duda de estar en contra de los efectos de una guerra que ha provocado más de 40 mil muertos en cinco años.
Y todavía hoy pronosticó Genaro García Luna, protagonista de esta guerra desde su comando de la Secretaría de Seguridad Púbica, que aún faltarán siete años más para que “disminuya” esa violencia.
Jenaro Villamil 
Todos tenemos derecho a expresarnos, así como tomar partido en algún tema, esa es la libertad que da la democracia, sin embargo, el análisis profundo de los significados me lleva a darle más importancia a lo que se está gestando en las redes sociales así como de boca en boca.
¿Quién dice ¡no más sangre¡?, ¿las víctimas de la guerra contra el crimen organizado?, ¿la oposición a Calderón? ¿Todos los que odiamos la violencia?, ¿el narco?.
No creo que exista alguien que le guste la violencia, sin embargo estoy empezando a creer que este es el estandarte perfecto para todos aquellos opositores al régimen actual, por eso pregunto; ¿Qué significa no más sangre?, puede significar; no me gusta la estrategia en contra del crimen organizado, no me gusta Calderón, no me gusta el ejercito, no me gusta la policía federal, no me gusta que maten gente, aquí tenemos una ambigüedad y tema de debate para muchos días, estas ideas que pueden significar, ¡no más sangre!, NO son exclusivas de las víctimas inocentes de la guerra contra el crimen organizado, ya que cazan perfectamente con:
1.- Lo que quiere el crimen organizado, que en muchas ocasiones han financiado plantones y manifestaciones para sacar a la PFP o al Ejército de las calles de algunas ciudades, lo que llaman “calentar la plaza”
2,. Lo que quieren los sistemáticos opositores al presidente Calderón, a quienes no les conviene que esta estrategia salga bien, porque eso significaría la posibilidad de que el PAN continúe en la presidencia.
Que significa ¡no más sangre!, ¿no al ejercito en retenes a las afueras de las ciudades conflictivas?, todos sabemos que el ejército no está entrenado para trabajos de policía en las urbes, pero tampoco las policías estatales y municipales están preparadas para hacer frente a narcotraficantes bien entrenados y con armamento que es ilegal que usen las policías estatales y municipales, porque son armas de uso exclusivo del ejército, esto está en la ley, la pregunta es; si el PRI con el PRD podrían cambiar esta ley para dar mejor armamento a las policías estatales y municipales, ¿Por qué no hacen esta reforma?, las respuesta es porque no les importa, lo que quieren es que la administración actual falle y usar ¡no más sangre! Como estandarte de campaña.
No quiero parecer insensible, pero hay una diferencia muy marcada que muchos no quieren ver, la mayoría de los estados y municipios de México están gobernados por la oposición, así como la cámara de diputados, por eso es mi preocupación es, que debemos hacer entender a nuestros gobernantes en las campañas, que como oposición no debe entenderse “estar con contra sistemática del gobiernos”, sino ser un contrapeso de propuestas para sacar adelante al país.
Hasta hoy no he escuchado una solo propuesta ni de Peña ni de Marcelo ni de AMLO referente a la violencia. La educación es parte fundamental de una estrategia pero que debe empezar hoy para que el día de mañana tengamos mejores ciudadanos, quisiera escuchar estrategias diferentes para combatir al crimen organizado, detener cargamentos de droga y detener grandes capos hoy sin en uso de la fuerza.
¡No más sangre! significa un grito sincero y desesperado de hartazgo a la violencia, que está siendo ensuciada por la carroña electorera de una oposición que no tiene la posibilidad de co-gobernar porque no le alcanza el talento ni la creatividad para serlo.
Interesante análisis, refleja la preocupación de muchos porque los políticos o los partidos pudieran llegar a encabezar las marchas contra la violencia en el País, sin embargo creo que los ciudadanos NO lo vamos a permitir; este es un movimiento ciudadano que ha mostrado su rostro y gritado su irritación a los cuatro vientos y fuera del País también, porque YA ESTAMOS HASTA LA MADRE de los políticos, no de algunos, ni de algun partido, sino de todos (políticos y partidos) de cualquier color e «ideología»
No somos tontos y por ello no nos tragamos eso de que no hay de otra y de que son riesgos inevitables, pues sabemos que la corrupción, la complicidad y la impunidad generalizadas sólo garantizan el fracaso de esta guerra inútil, también sabemos (porque los vivimos) que el Pueblo y no los políticos somos quienes corremos y sufrimos las conscecuencias de los enormes riesgos que «alborotar el avispero» nos han acacionado y sabemos que ellos, los políticos y poderosos del País, no solo están «escondidos» y protegidos y «blindados» contra todos los riesgos, sino que además, se están beneficiando como nunca antes con la mentada guerra, mientras al Pueblo que se lo lleve la tristeza; la guerra es la prioridad, y los derechos humanos, las oportunidades, las libertades y la paz social tendrán que esperar (cuando menos unos 7 años calcula el secretario de la SSP) para que nuestros políticos «se dignen siquiera a comenzar a tocar estos temas». Ahora solo la guerra contra el narco y las elecciones son los únicos asuntos posibles de tratar…..
Pero la lucha por la Nueva Democracia Global del sigloXXI cabalga a galope por todos los países del mundo y aquí en México comenzó a tener precencia…..
¡SI SE PUEDE!
En este asunto difieron totalmente de esta postura radical y extremista, no considero que el no hacer nada sea una solución para la violencia y narcotrafico que vivimos actualmente en el país, debemos de tomar ejemplos de otros paises que ya pasaron por este problema y lo han ido superando, como Colombia esto sin ser antinacionalista ni nada de eso sino mas bien un ser pensante y analitico que puede ver mas alla de sus narices.
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