Jenaro Villamil

Fuente: http://www.guardian.co.uk/
La sucesión de acontecimientos y revelaciones en torno al escándalo detonado a raíz de la confirmación de que el corporativo News Corporation, del magnate Rupert Murdoch, ha realizado espionaje telefónico contra más de 4 mil personas puede costarle la renuncia al primer ministro conservador británico David Cameron.
Tendrá consecuencias de mayor alcance en el mediano y largo plazo: el Watergate británico forzará a un replanteamiento en la coalición de intereses que ha unido a Murdoch con los gobiernos conservadores, neoliberales y belicistas de las últimas décadas en Gran Bretaña y Estados Unidos.
Una apretada reseña del verano más negro en la historia de Rupert Murdoch, un hombre con activos superiores a los 38 mil millones de dólares y 53 mil empleados en todas sus empresas, es la siguiente: