Jenaro Villamil
El pasado 29 de agosto el grupo de ciudadanos que conforman el Tribunal Electoral Ciudadano elaboró un Dictamen Ciudadano Relativo a la Declaración de No Validez de la Elección Presidencial.
En el documento, los ciudadanos declaran inválida la elección que ratifica como Presidente de los Estados Unidos Mexicanos a Enrique Peña Nieto. Además, encausa al TEPJF para reconocer «las violaciones a principios fundamentales perpetradas por la coalición Compromiso por México y su candidato presidencial»; hacer respetar la Constitución y los Tratados Internacionales en la materia; ejercer su facultad de control constitucional difuso de la Carta Magna, para dejar de aplicar normas secundarias en materia electoral y que en consecuencia se declare que algunos principios constitucionales fundamentales han sido violados, actualizando así sus causales de nulidad y, por ende, declarando como no válida la elección presidencial de 2012, ya que resulta contraria al principio constitucional de elecciones y voto libres.
De acuerdo al Dictamen, se establece que durante el proceso electoral se dieron claras «violaciones constitucionales y convencionales», graves y sistemáticas que generaron condiciones de inequidad a lo largo de las campañas electorales y durante el día de la elección, misma que fueron determinantes en el resultado de la misma.
Ante posibles dudas de carácter jurídico, el Dictamen Ciudadano expone los elementos necesarios que permitirán al lector interpretar «que la violación a principios constitucionales es un factor determinante para la nulidad de las elecciones».
El tribunal ya dio por buena la elección presidencial y aunque ésta haya sido comprada, los votos no hablan, no podemos saber cuántos fueron comprados o cohesionados. Sigo pensando que las instituciones que sólo se dedican a legalizar lo ilegal no deben de existir.